Aburrida de gusto, si se puede decir

Elena Blasco |

Mary Lou, la canción. No sé de quién es. Él dice: Hello, Mary Lou, good bye heart, o parecido, pero eso no importa. Lo que importa es que cada vez que calla, hay una monotonísima guitarra que hace cuatro notas, siempre las misma, cuatro notas entre las palabras. Y yo no hago más que esperarlas. Cada vez que las oigo la misma sensación, cada vez, las espero, se acaban vuelven en seguida y es lo más parecido a la felicidad, aunque parezca una exageración. No lo es. Me produce adicción. Cuando se acaba el disco me faltan. A veces dejo que suene el siguiente disco por el placer rarito de esperarlas. Es una nostalgia enorme del mejor de los mundos. Una alegría, dan ganas de llorar, pero ni se te ocurre, un cachondeo feroz y para siempre, allí no da miedo nada.

Esa obsesión (monotonía) tiene tanta gracia, es tan imbécil.

Me pregunto si el que la toca sabe lo que puede producirle a alguien.

Además no le estoy agradecida, porque sólo me parece un milagro. Me emocionan quinientas veces menos todas las estrellas.

Oigo la canción en negativo, como si el cantante fuera el fondo. Ciertos acordes (si es que se llaman así) del Rock & Roll me tocan físicamente en el acto y todas las veces, igual que si tocase con el dedo una brasa encendida me quemaría todas las veces.

No me extraña que Elvis Presley durara poco, no se aguanta por mucho tiempo, hay hasta que distraerse a posta. Además ese sí que sabía lo que producía en los demás y eso tampoco debe ser fácil de aguantar.

Otra cosa, sólo son ciertos acordes, sólo esos.

¡No he dejado de oírla mientras escribía, me lo ha dictado todo! ¡Es la monda y me dictaría más!

Me parece que estoy hablando del ritmo. Soy lentísima siempre para ponerle nombre a la cosa más simple. Pero no está mal tampoco mantenerse en una especie de ineptitud aventurera. Todo el puto rato descubriendo la pólvora. Ahora que no lo puedes contar mucho porque no conviene. Pareces tonta.

Son las cinco. Vengo de un baile, hace buenísimo. Por ejemplo, lo de hace buenísimo me suena mexicano de repente. Tengo más: The more I see you, de Chris Montez. Esa me mata entera, la canción entera, enterita. Es una cadencia ahíta de ser feliz, está acostumbrada… aburrida de gusto si se puede decir…

F I N

 

 

Bored of pleasure, if I can say such a thing

Mary Lou, the song. I don’t know who wrote it. He says: Hello, Mary Lou, good-bye heart, or something along those lines, but that doesn’t matter.

What matters is that every time he is silent, there is a monotonous guitar tune made up of the same four notes. And I can’t stop myself from waiting for them. They always make me feel the same way, each time I wait for them, they return and are the closest thing to happiness, although it might seem an exaggeration. It is not. I am addicted. When the record is over

I miss them. Sometimes I listen to the next record, just to wait for them again. It is the best nostalgia in the best possible world. I am so happy

I want to cry, but I don’t, I get ferociously and forever giddy, and I fear nothing.

This obsession (monotony) is so funny, it is so stupid. I wonder if the one playing knows what he can do. I am not that grateful really, because it just seems like a miracle. I am far less moved by stars. I hear the song in negative, as if the singer were the background. Certain chords (is that the right word?) of Rock and Roll physically touch me, always and immediately, as if I were touching a blazing coal, and I always get burnt.

I am not surprised that Elvis Presley didn’t last long; you can’t stand it for very long, and you must distract yourself on purpose. Also, he knew what he did to others and that cannot be easy to bear.

Another thing, only certain chords are true, just those.

I have not stopped listening to it as I was writing, it dictated everything!

It is hilarious and would carry on dictating!

I think I am talking about rhythm. I am always very slow when giving a name to the simplest thing. But it is not bad to maintain a certain adventurous ineptitude. I spend every fucking day discovering gunpowder. Not that you can’t say it much because it is not a good idea. You look silly.

It is five o’clock. I have just come from a dance. The weather is gorgeous.

For example, saying that sounds Mexican suddenly. I have more: The more I see you, by Chris Montez. That whole song kills me, the whole thing.

It is a tune so used to be happy; it is almost bored by it…

THE END

 

 

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